29.11.18 Una muy bonita jornada para cerrar la bitácora de Noviembre; en compañía del Dr. Pedro Gallardo, fuimos al Farallón y tal como lo habíamos visualizado, el mar (olas menores a 30cm con frecuencia de la cresta de hasta 9seg), la pesca (hubo bonitas, sierras y barriletes; terminamos satisfactoriamente cansados) y el espectáculo (vimos ballenas jorobadas a menos de 100m de la embarcación Pa’ntonces), obtuvieron una calificación sobresaliente que mucho agradecimos al Señor, este par de septuagenarios.

28.11.18 Hoy fui a Topo a cargar un poco de gasolina a una de las lanchas grandes y para que el viaje no fuera en balde, metí la Piñitas al agua para recorrer mis ya tradicionales sitios de pesca; hubo muchos bichis (realmente cansan pero cuando no hay más, son bienvenidos), también cochis y toros, pero la “estrella” de la mini jornada lo fue un magnífico coconaco (es mi presa favorita; últimamente mi esposa los ha estado preparando en caldo y desde ahora declaro que no hay mejor pescado que estos “mueludos”), de 40cm que al igual que todos los de su especie, hizo sonar estridentemente la chicharra del carretito Okuma (lo que hizo que la adrenalina recorriera toda mi vetusta humanidad), luego siguió la “encuevada” típica de estos individuos (estuvo adherido a las rocas por más de 5 minutos), la “pelea” para que se alejara de las piedras y finalmente (gracias a la benevolencia del Señor), su captura en la red.

24.11.18 Sigue la sorprendente productividad de Topolobampo ya que tan solo en un corto lapso de tiempo (6:15 a 8:15h), los peces predadores embistieron con muchas ganas a los señuelos que les ofrecí; hubo los ya infalibles cochis, pargos sarteneros (se prendieron 3, mismos que regresé al agua sin daños mayores), sierras (no están muy grandes pero sí bastante tiernas y eso garantiza su inocuidad; me traje 3 para regalarlas a los vecinos); también salió un mero pequeño que obviamente regresé a su hábitat y la “estrella” de la jornada lo fue una corvina bastante buena (también la regalé a los vecinos; midió 85cm aunque por su fuerza, pelea y la manera de hacer sufrir a los carretitos Okuma,  originalmente la creí más grande), que acabó con mis ya menguadas fuerzas por lo que (y a Dios gracias), satisfactoriamente cansado, tuve que direccionarme al náutico.

20.11.18 Una nebulosa y fría mañana (ahora en “solitario” ya que mi “compa” tuvo que asistir a la escuela; a sus 5 años, está en 2° año de preescolar), en la que los pargos sarteneros (se prendieron 4; todos fueron regresados al agua sin mayores daños), los cochis, bichis (había tantos que a las 7:45h me “obligaron” por cansancio, a abandonar la jornada) y peces lagartija, se “aprontaron” para celebrar también, esta fecha conmemorativa en México.

19.11.18 Sigue el Señor propiciando las buenas pescas en la bahía y con ello también se acentúa la buena relación nieto-abuelo ya que en esta mini jornada, además de cochis, bichis, barracudas (había muchas cuando estaba todavía subiendo la marea), se prendió un buen coconaco que hizo, además de sonar estridentemente la chicharra del carretito Okuma, sudar la gota gorda al Abe ya que durante la pelea, el animal se resistió a rendirse fácilmente y ambos “individuos” (para mi beneplácito ya que solo así se está quieto por un rato), terminaron agotados.

18.11.18 Una mini jornada dominical (6:10 a 7:40h; hacía frío y le batallé para que se levantara temprano), de pesca pobre (solo sacamos peces lagartija que el Abe no conocía), pero de rica interactuación nieto-abuelo (no para de hablar e inclusive en los lapsos de inactividad, como buen pescador se da ánimos ya que me hizo cambiar los colores de los señuelos Storm para ver si mejoraba los resultados), pletórico de anécdotas de su escuela y de su corta existencia la cual, con la benevolencia del Señor y extensiva para los otros 9 nietos, espero sea larga y abundante de positivos episodios.

17.11.18 Hoy me acompañó mi nieto Abelardo a disfrutar de mi pasión-afición-vicio (creo que a él, por la gracia del Señor, también se le está formando el hábito de convivir con la mar) y tuvimos suerte con los pargos sarteneros que se prodigaron en embestir a los señuelos Storm; hacía mucho frío por lo que nos regresamos luego al náutico, durando menos de una hora esta mini mini jornada. 

14.11.18 Una ventosa (ráfagas hasta de 18km/h que hacían muy problemática cualquier maniobra en la Piñitas), bastante friolenta (el agua a las 6AM estaba a 23°C) y concurrida (los pescadores comerciales estaban guarecidos del viento precisamente por donde es mi ruta de pesca por lo que no me sentí cómodo), mini jornada (6 a 8h), que sin embargo y por la benevolencia del Señor, fue muy “movida” (terminé bastante pero agradablemente cansado), en la que hubo pargos (algunos raiceros, otros alazanes; un animal y después de un “adrenalóico” embiste, se llevó uno de mis señuelos favoritos), bastantes cochis y peces lagartija. 

12.11.18 Un variado “san lunes” pues temprano hubo sierras, coconacos, cabrillas areneras, bichis, cochis y para evidenciar la gran biodiversidad del necton, este día también se prendieron peces lagartija; los pescadores comerciales ya se dieron cuenta de la presencia de las sierras en la masa de agua interior y hoy estaban tendiendo chinchorros para capturar esta especie de peces que comercialmente, les reditúa buenos dividendos. A las 8AM, suficiente y “agradablemente” cansado de maniobrar cañas, carretes y motor marino, me salí del agua agradeciendo al Señor su bondad para con este (y toda su familia), siervo de la tercera (o cuarta?), edad.

09.11.18 A pesar de un manifiesto pero satisfactorio cansancio (a Dios gracias), hoy “tuve” que ir a Topo para cambiar el termostato del bloque del motor Honda 90 y para que el viaje no fuera en “vano”, puse a la Piñitas en el agua por un corto lapso de tiempo (6 a 7:30h); para mi sorpresa, la bahía estaba pródiga (a diferencia del día de ayer en el Farallón), ya que abundaron los pargos sarteneros, los cochis, una buena corvina (fue el primer pez que se prendió cuando apenas iniciaba mi recorrido y sin embargo, se fue cuando todavía en la obscuridad, no pude meter bien la red en el agua y lo que hice fue quitarle el anzuelo simple; recientemente me pasó igual con un coconaco que cordeló Alfredo pero este animal si lo pudimos lograr) y las sierras.

08.11.18 Algún día tenía que ser y hoy, por más que buscamos (con mi hijo Alfredo y el Dr. Pedro Gallardo), en los alrededores del Farallón e inclusive hasta más de 17km al sur de la piedra, a las bonitas, sierras, dorados, picudos, atunes o ya de perdida barriletes (había grandes cardúmenes de estos túnidos pero por mas que les insistimos con señuelos duros y blandos, ninguno se prendió en los curricanes), nos tuvimos que conformar con ver caguamas, lobos y delfines; afortunadamente, el mar estuvo tal como lo pronosticó el internet por lo que no “sufrimos” mas de la cuenta y además, el Alf tuvo la “osadía” de meterse al agua fría para interactuar con la fauna endémica del Farallón y de paso, tomarnos una magnífica postal.

07.11.18 Siguen las bendiciones del Señor y esta fue una mañana perfecta con buen clima (aunque para las 8AM el sol estaba “butal” y nos obligó a salir del agua), buena marea (antes que terminara de subir, un animal, seguramente coconaco, se prendió y se encuevó y por más que hicimos lucha, nunca lo pudimos mover de su protección), agua razonablemente limpia (agarramos algunas bolsas de plástico) y mucha proclividad de los peces hacia los señuelos Storm (hoy solo usamos este tipo de curricán), ya que hubo mini sierras, cochis, pargos sarteneros (nos trajimos 3 para los vecinos) y también salió un coconaco de buen tamaño (44cm), que nos lo vamos a comer este día mi esposa, el Alf y yo.

06.11.18 En la Piñitas, hoy fui con mi hijo Alfredo a la bahía y con la bendición del Señor, los pargos (nos trajimos 2 sarteneros y uno de 46cm), los cochis, los bichis y ahora las sierras, se prodigaron en atacar los señuelos Bomber y Storm, haciendo la delicia del Alf al escuchar el casi continuo, adrenalóico y estridente sonido de los carretitos Okuma que sin dar cuartel, recuperaban la línea impidiendo que las piezas corrieran más de lo prudentemente aceptable; fue una excelente mañana, fresca y con la marea entrante por lo que el agua estaba razonablemente limpia, aunque un poco fría ya que la temperatura oscilaba entre los 26 y 27°C.

04.11.18 Una verdadera bendición del Señor que me permita, a estas alturas del “partido”, disfrutar a mis hijos y nietos en la navegación y pesca, afición-pasión-vicio que en estos años dorados se me ha arraigado de muy bonita manera; hoy me acompañaron Alfredo y Abelardo y para no quedar mal en estos primeros días del mejor mes (según mis estadísticas), los bichis, cabrillas areneras, cochis, pargos (todos sarteneros; no nos trajimos ni uno), corvinas y barracudas (nos las trajimos todas para regalarlas a nuestros vecinos en el ejido), estuvieron muy proclives para abalanzarse con ímpetu (para beneplácito de la tripulación), sobre los señuelos Storm y Bomber habilitados con anzuelos simples.

03.11.18 Ahora y en compañía de mis nietos Alfonso y Abelardo; mi hijo Alfredo y Fanny su esposa, nos dimos a la tarea de realizar una buena pesca para soslayo de los integrantes que nos visitan desde Guadalajara; los peces (pargos sarteneros que localizamos en el mismo sitio donde han estado en días previos; barracudas en cantidades tales que cansaron a todos los integrantes de la tripulación; bichis que se prendían en todo tipo de señuelos y frecuentemente, de a 2 por evento y también varios cochis, algunos robados y otros prendidos del hocico), estuvieron realmente cooperativos y aunque los regresamos todos al agua sin mayores daños, la diversión adrenaloica (obviamente con la anuencia del Señor), se prolongó hasta bien entrada la mañana.

02.11.18 Siguen las buenas pescas y esta mañana, aún sin generalizarse la claridad del día, me encontré a los pargos sarteneros (también hoy los regresé todos al agua, sin daños aparentes gracias a los anzuelos simples), en el mismo sitio que estaban ayer; esta mini jornada fue muy breve ya que se suponía iba a ir el llantero a cambiar las ruedas de un remolque pero a las 8, avisó que siempre no iba a acudir a la cita porque se sentía “indispuesto” (cosas del día de muertos) y que el trabajo lo realizaría mañana sábado por lo que otra vez “tendré” (si el Señor me lo permite), que ir otra vez a mi “querencia”, aunque también espero que mi hijo Alfredo, su esposa Fanny y mi nieto Alfonso, estén por estos lares para que me acompañen a realizar el “sacrificio”.

01.11.18 Inició el mes con los mejores augurios para el vicio-pasión-afición que me “domina” ya que en esta mini jornada, los coconacos (me traje 2; uno de 43cm que con su “arrebato” y pelea de más de 10min me produjo intensa generación de adrenalina y otro de 34cm), los pargos sarteneros (de alrededor de los 32cm; no me traje ni uno pues prefiero con mucho a los coconacos), barracudas (luyeron notoriamente el monofilamento por lo que tuve que hacer arreglos sobre la marcha para no exponerme a perder piezas o curricanes), cochis (a Dios gracias, en esta ocasión no se prendió bichi alguno) y los señuelos Storm y Bomber se confabularon para mantenerme ocupado para finalmente, terminar satisfactoriamente cansado.