27.07.22 Al igual que ayer, hoy tuvimos otra épica jornada esta vez en compañía de mi hijo Alejandro y los hermanos Neto y Arnaldo Valdez, ambos muy buenos compañeros de navegación y pesca; el mar estuvo increíblemente magnánimo ya que además de estar calmo, nos proporcionó muy buenas capturas de dorados (muchas, muchas hembras fueron regresadas al mar) y pudimos atrapar y liberar (siguiendo todo un protocolo de no sacar al animal del agua, quitarle el anzuelo limpiamente y reanimarlo con la embarcación en avante), un bonito y vigoroso pez vela. Otro espectáculo que nos brindó el Señor el día de hoy, fue el encuentro con caguamas que se encontraban en plena actividad reproductiva por lo que cuando nos acercamos a ellas, ni se inmutaron con nuestra presencia.

26.07.22 Jornada épica en los alrededores del Farallón, en la embarcación Pa’ntonces y con la grata compañía de mis hijos Abelardo, Alejandro y mis nietos (sus hijos), Abelardo y Ricardo; hubo muchos dorados (pudimos liberar a la mayoría de las hembras), encontramos los petos (wahoos, para los anglofílicos) y hasta los indeseables barriletes dieron con los señuelos que pusimos en el agua. Cada vez que hacemos este tipo de navegación y pesca, le doy las gracias al Señor por la convivencia con mis descendientes y además, le agradezco sobremanera que me permita enseñar lo poco que se sobre esta pasión-afición-vicio, muy especialmente a los nietos que sin lugar a dudas, están siguiendo mis pasos.

22.07.22 Después de ver el pronóstico (a las 3AM), me aseguré que el inicio del mal tiempo iba a retrasarse un poco por lo que decidí realizar una mini jornada “mañanera” (6 a 8h), por los mismos sitios donde antier estaban los pargos; la singularidad de este día fue que aún antes de que se generalizara la claridad del día, volví a encontrarlos (y regresarlos indemnes a su nicho), mismos que ahora eran de otra variedad (los conocemos como “raiceros” y tienden a ser mas largos que anchos). Junto con ellos y para beneplácito de mis vecinos, hubo buenas corvinas por lo que en comunión con el Señor, terminé agradablemente cansado y agradecido de su infinita misericordia.

20.07.22 Ante la nada remota posibilidad que en los próximos días no haya condiciones de marea y/o climáticas adecuadas para salir a navegar, hoy realicé una corta “mañanera” (6 a 8h), en el náutico, la escollera de la API, el Pinto y el cerro de San Carlos, donde el Señor me mostró la singularidad de cada una de mis jornadas (es por eso que me tiene felizmente atrapado en este el último tramo de vida), ya que hoy solo prendí pargos (8, juveniles y sarteneros; todos fueron regresados indemnes), sin que hubiera otra especie de la ictiofauna que se interesara por los señuelos que puse en el agua.

18.07.22 Una mini jornada (6 a 8h), “mañanera” de “san lunes” tormentosa ya que hubo lluvia, viento, relámpagos y truenos, por lo que terminé totalmente empapado pero muy satisfecho de que el Señor me cuidara de los rayos (me preocupaba mucho que el aluminio de la Piñitas atrajera la electricidad) y me proporcionara los medios para satisfacer mi afición-pasión-vicio ya que a pesar de la turbidez del agua, la alta temperatura de la superficie, la basura antropogénica y la marea de bajada, encontré los peces que se interesaron (la mayoría roncachos), por los señuelos que puse en el agua y hasta me traje un muy buen coconaco (45cm), que resultó bastante vigoroso y batallador para el cordeleo.

13.07.22 Hoy salí a los alrededores del Farallón con el Señor, mi compañero inseparable y como Él es un experto, me puso en el sitio donde pululaban los dorados (“solo” me traje 12 ya que a las hembras les permitía la posibilidad de que se liberaran), además, Él mismo me señaló que tipo de señuelos usar y me aconsejó poner en el agua puros curricanes de 15cm (6” para los anglofílicos), ya que a estas alturas del partido de mi vida, me inquieta sobremanera la posibilidad de que un picudo se me prenda y no pueda liberarlo satisfactoriamente; además, usé carretes Penn 4/0 con línea de 0.55mm. En definitiva, otra breve jornada (6:30 a 10:30h), que me hace reivindicar lo mucho que voy a extrañar cuando me muera.

11.07.22 Otra alucinante “mañanera” (6 a 8h), de “san lunes” que aunque comenzó floja, tal vez por el agua que estaba muy sucia (había mucha basura antropogénica), caliente (la superficie en los 31°C), con viento y además nublado, para las 7h la magnificencia del Señor intervino en favor de este “joven” de la tercera edad, de tal forma que  la ictiofauna se activo de manera sorprendente y las cabrillas, los roncachos, los cochis y hasta los pargos (me traje uno de 51cm), embistieron en forma consistente a los señuelos Bomber que puse en el agua.

08.07.22 Gloriosa jornada en los alrededores del Farallón, con mi hijo Alejandro y mis nietos Ricardo y Abelardo; gracias al Señor, todo salió extraordinariamente bien ya que el mar estaba muy a modo y la pesca (incluyendo 4 indeseables barriletes), pues ni se diga ya que de nueva cuenta encontramos a los dorados (picaron más de 15; nos trajimos 10) y además, les tomamos fotos y después liberamos, a un pez vela (se prendió cuando hice el intento de quitar de su alcance el señuelo) y un marlín muy peleonero que finalmente Alejandro pudo liberarlo del anzuelo sin mayores daños, ya en la falca de la embarcación. Literalmente y para deleite de los niños, avistamos decenas de caguamas, delfines, picudos brincando y hasta una ballena piloto.

07.07.22 En esta “mañanera” (6 a 8h), el Señor se portó magnánimo con este vetusto mortal ya que todo estuvo en grado superlativo: el viento (dificultaba la maniobrabilidad de la lanchita de aluminio), la temperatura del agua (del orden de los 31°C), la basura antropogénica aportada por los recientes escurrimientos y también……….. la pesca ya que hubo corvinas y robalos (para mis vecinos), cochis, bichis, cabrillas, roncachos y pargos (me traje uno de 48cm), por lo que al término de la jornada, quedé “dado”, como dicen los anglofílicos.

05.07.22 Hoy a las 4AM vi que había una “ventana” (hasta las 10AM), con buenas condiciones para salir a dar una vuelta por los alrededores del Farallón; por lo tanto, “invite” al Señor y con tan buen compañero, pedí al tractorista del náutico que me pusiera en el agua a las 6:40h. El buen tiempo hizo posible que a las 7:30h pudiera comenzar la “fiesta” (esta vez solo hubo dorados) y para cuando habían picado alrededor de 20 animales (ya eran las 9:30h), me direccioné de regreso al náutico, exhausto y muy agradecido con mi excelente compañero. Debo consignar que también se prendieron 2 pez velas juveniles, mismos que permanecieron en el agua hasta que pudieron auto liberarse, ya que nunca los presioné y por el contrario, dirigí la embarcación hacia ellos para que la línea estuviera siempre floja.

04.07.22 Una buena mini jornada (6 a 8h), de “san lunes” en la que los cochis me “apabullaron” (se prendían con todo tipo de señuelos, fueran Storm o Bomber) y me quitaron la escasa energía que había recuperado en el lapso de 2 días; sin embargo, también hubo algunos pargos (todos los peces fueron regresados sin mayores daños a su entorno, gracias a los anzuelos simples), con los que el Señor me compensó por el “esfuerzo” que hago para mantenerme “vivo” y sobre todo, lúcido en las “últimas” entradas de mi presencia terrenal.

02.07.22 Hoy me gustó realizar una corta “mañanera” (6 a 8h), para abrir la bitácora de julio aunque por el viento, la lluvia, la marea arrastrada y la cálida temperatura de la superficie del agua (31°C), estuve a punto de arrepentirme; pero como siempre, el Señor me “impulsó” para aprovechar que ya me repuse de la épica jornada de hace 2 días y me mostró que cada ida al mar, es una novedosa sorpresa. En esta ocasión y además de las cabrillas, los roncachos y los bichis, se me prendió un bagre (chihuil), de más de 60cm y 5kg de peso (realmente estaba obesa; distinguí que era hembra por las papilas genitales), que puso a prueba cañita, carrete, señuelo, monofilamento y además, un pargo “triple cola” (Lobotes pacificus), de 40cm. También hoy, todo fue regresado indemne al mar.