jueves, 27 de agosto de 2015

27.08.15 Ante lo inestable que está la meteorología en la zona norte de Sinaloa, hoy opté por hacer una pequeña excursión dentro de la bahía de Topolobampo y aunque salí tarde porque no llegaba el tractorista, encontré que la subida de la marea traía buenas piezas alrededor del Punta Prieta; puse en el agua 3 señuelos duros Bomber de 13 cm a los cuales les sustituí los grampines (anzuelos triples), por anzuelos simples y en el sitio aludido, fueron agresivamente atacados por diferentes especies de peces; hubo toros (jureles en algunas zonas del país), de buen tamaño y peso (entre 4 y 5 kg), que hicieron sonar los carretitos Daiwa como nunca lo habían hecho, también se prendieron bichis y un cochi de tal suerte que las 2 horas y media que estuve navegando (7;30 a 10 h), fueron más que placenteras y por supuesto, un paliativo a la pasión-afición-vicio que en esta etapa dorada de mi vida, me “ataca” con furia pero sin mayores consecuencias (al menos eso es lo que creo y quiero convencerme de ello).

domingo, 23 de agosto de 2015

23.08.15 Hoy salí hacia el náutico con cañas gruesas y delgadas ya que no sabía si iba a poder salir a la parcela pues amagaba desencadenarse el mal tiempo; antes de poner la Sea Hunt en el agua, llegaron unos amigos pescadores en la lancha Marathón y comentaron que ellos sí se iban a arriesgar. Ante esta situación y no queriendo ser menos “valiente” para sortear la lluvia, el viento y las olas, subí 3 cañas gruesas a la embarcación y me dispuse a enfrentar lo que efectivamente ocurrió: olas secundarias de más de 50 cm con crestas a cada 3 0 4 segundos, hicieron que las rótulas de mis rodillas soportaran un esfuerzo no apto para personas mayores (término elegante para no decir “viejos”); además, durante mucho tiempo del que estuve en el agua se presentó una pertinaz lluvia que me empapó todo y por si eso fuera poco, hasta las 10 h amainó el viento y pude tener absoluto control para mantener el rumbo de la embarcación. Lo positivo de esta jornada fue el avistamiento de varias doradas dentro de un cardumen de barriletes; sin embargo, los señuelos duros (Williamson Speed Pro habilitados con anzuelos simples), que me vi forzado a utilizar por la marejada, solo fueron del agrados de los túnidos (animales grandes, con más de 5 kg de peso), los cuales terminaron por agotar todas mis fuerzas por lo que me vi obligado a suspender el viaje y regresar a tierra, no sin antes escuchar en varias ocasiones y en todo su esplendor, el “majestuoso” sonido de los Penn 9/0.

sábado, 22 de agosto de 2015

22.08.15 Este día le tocó el turno de “funcionamiento preventivo” (el objetivo es que siempre estén en óptimas condiciones), a los motores de la Sea Hunt; entré al agua a las 7:30 h y la salida fue a las 10:15 h, sintiendo un “agradable cansancio” muscular debido a las ininterrumpidas embestidas que toros, barracudas y bichis, les dieron a los señuelos duros (Bombers de 13 cm, habilitados con anzuelos simples), enfrente del náutico, alrededor del terraplén de la API y en Punta Prieta. Hoy no hizo el “calorón” de días previos porque estaba nublado, con viento fuerte del NE, chispiando y con rayos (tuve la precaución de abatir la antena del radio; hasta quebré la base de plástico ya que estaba pegada); la temperatura del agua rondaba los 30°C y contra lo que hubiera esperado, el agua estaba transparente y no se notaba influencia de las precipitaciones que hubo en la región, tal vez porque la marea estaba subiendo lentamente y no se formaban corrientes que resuspendieran sedimentos. La pesca de este día (barracudas y toros se quedaron con los tractoristas del náutico), se hizo con cañitas de 1.50 m que tienen sólo 2 anillas y que compré hace más de 10 años en la tienda Liverpool de la Culiacán; son marcha “patito” y me llamó la atención lo bien que se portaron en la pelea con los toros. Mañana domingo, si Dios no dispone otra cosa (hay mucha incertidumbre en las condiciones del mar afuera), quiero llevar a los nietos para que aprovechen esta corrida de animales que hay en la bahía.

martes, 18 de agosto de 2015

18.08.15 Con la única y exclusiva finalidad de darle “seguimiento” a la pasión-afición-vicio de estar en contacto con el mar (ya tenía 5 días sin ir a navegar), hoy fui a Topo y puse en el agua la Boston Whaler Outrage de 6.60 m (26’), que tiene los 2 motores Optimax de 225 hp; inicié la jornada a las 7:30 h y me salí a las 10 h exhausto por el oprobioso calor que estaba haciendo y además, sin el menor aliciente de capturar algún buen pescado ya que solo se prendieron bichis y cochitos, todos frente a las instalaciones de la SEMAR. Este fue uno de esos días (y de muchos más durante los meses de Julio y Agosto), que no hay prácticamente nada de actividad en el agua, uno de esos días que los ve uno en el profundímetro pero no quieren saber nada de los señuelos; sin embargo, claro que fue uno de esos días que justifican la premisa: “es mejor un mal día de pesca que uno haciendo …….cualquier otra cosa”. Espero que una vez intensificadas las precipitaciones sobre el norte de Sinaloa, las cosas cambien y tengamos mejores condiciones para que las jornadas en el mar, siquiera compensen los piquetes de moscos y jejenes que han estado muy activos en todos lados pero más en la zona costera. 

miércoles, 12 de agosto de 2015

12.08.15 Se suponía que un potencial comprador de los motores Optimax iba a verlos funcionando este día en Topo; sin embargo, hasta las 8 h nadie se presentó y no queriendo desaprovechar la marea, puse en el agua 3 señuelos Bomber de diferentes colores (azul, café y pinto), con tan buena suerte que inmediatamente fueron “requeridos” por diferentes especies que desafiando las altas temperaturas del agua y consecuentemente, la baja concentración de oxígeno disuelto, se atrevieron a retar los anzuelos simples con los que he equipado todos mis señuelos. Primero fueron bichis, luego barracudas y finalmente llegaron las corvinas las que tuve a bien subir para deleite de los tractoristas del náutico que inmediatamente, los evisceraron y escamaron para prepararse un opíparo desayuno; esta mini jornada se caracterizó por un inclemente sol y por supuesto, un bochornoso calor ambiental de 36°C (en la superficie del agua, la lectura de la temperatura marcaba 32.5°C). Cabe destacar que los motores se portaron de maravilla (estoy pensando seriamente en quedármelos) y por las nuevas disposiciones de la Capitanía del Puerto de Topolobampo, tuve que imprimir el nombre a la nueva (para mí), Boston Whaler; se llama Pa’ntonces, que me recuerde siempre del poema Para Entonces de Amado Nervo.

lunes, 10 de agosto de 2015

10.08.15 Dice el refrán que después de la tempestad viene la calma y apoyándome en esta conseja, hoy a las 5 visualicé un mar tranquilo como para dar una pequeña vuelta en las aguas costeras; metí la Sea Hunt a las 7:30 y para las 8:45 ya estaba en la cota batimétrica 36 donde había un gran “comedero”. Primero puse en el agua unos señuelos blandos Little Bad Dart de 20 cm e inmediatamente comenzó la “fiesta” amenizada con el sonido característico de los carretes 9/0; eran puros barriletes chicos que andaban tras alevines de sardina por lo que cambié a señuelos duros Williamson Speed Pro habilitados con un solo anzuelo y con ellos, estuve atrapando barriletones de buen tamaño y peso (todos fueron regresados al agua), que me cansaron sobremanera y aun así, no quería darme por vencido esperando que se prendiera un buen dorado. Después de 3 horas y ya casi exánime por el bochornoso calor, tuve que aceptar “mi derrota” y me direccioné a tierra, no sin antes volver a vivir el espectáculo de las caguamas descansando plácidamente sobre la mar calma, los peces voladores, los infaltables lobos y en esta ocasión, hasta la alarmante presencia de una ballena que de improviso, salió a respirar a menos de 10 m de la embarcación; también debo documentar que por primera vez en todas mis largas jornadas, una lancha de la Capitanía del Puerto de Topolobampo, se aproximó a inspeccionar donde andábamos yo y otras embarcaciones deportivas.

sábado, 8 de agosto de 2015

08.08.15 Ahora le tocó el turno de verificación a la Sea Hunt (Mi Última) y a sus motores Honda de 90 y 5 hp; ambos funcionaron muy bien después de 12 días de “abandono” e inclusive me proporcionaron, durante 3 horas (7 a 10 h), frente a las instalaciones del náutico, una jornada por demás placentera ya que en los señuelos Bomber de 13 cm que puse en el agua (uno azul, otro café y uno moteado, todos con anzuelos simples), se prendieron varias especies de peces: bichis, barracudas, sierras (de muy buen tamaño), cabrillas y un parguito sartenero. La verdad es que fue una sorpresa la intensa actividad de este día ya que la temperatura de 32°C en el agua, la marea “muerta” y los sólidos suspendidos (generados por las recientes lluvias y posteriores escurrimientos cargados con material particulado, que drenan hacia cuerpos de agua marinos), no auguraban que hubiera buena pesca en este reducido espacio de la bahía; por todo ello, no me cabe la menor duda que todavía el Señor me cuenta entre sus favorecidos y solo me resta agradecerle infinitamente su dispensa.



jueves, 6 de agosto de 2015

06.08.15 Después de manejar más de 3000 km durante los días previos (Los Mochis-Guadalajara-Monterrey-Los Mochis y a Dios gracias, todo bien con los hijos y nietos que viven alejados del ejido), hoy me fui al náutico de Topo y durante 3 horas (estaba haciendo un calor insoportable de más de 36°C, con la temperatura en la superficie del agua en 32°C, razón por la cual hay poco oxígeno disuelto en las capas superficiales y solo subsisten barracudas y bichis, especies que tienen poco requerimientos de este elemento), estuve dando vueltas en la Boston Whaler Outrage que tiene los 2 motores Optimax de 225 hp ya que el principal motivo de esta ida a Topo, era el de “optimizar” el funcionamiento de los motores Mercury. Para combinar la obligación con la devoción, puse en el agua 2 señuelos Bomber habilitados con anzuelos simples, mismos que fueron atractivos para las barracudas (no hubo muchas ya que solo alcancé a liberar 4; en el proceso, una de ellas me mordió el dedo pulgar izquierdo y con la “sangre derramada”, se hizo una buena mancha en el piso de la lancha) y antes de que me diera el “golpe de calor”, me salí del agua no sin antes agradecer al mar lo magnánimo que siempre (inclusive este inicio de agosto), se ha portado con este “viejo vicioso”, ya que han sido pocas las ocasiones en las que navegando enfrente de las instalaciones del club, no se prende algún pez en los señuelos.