lunes, 28 de enero de 2019

28.01.19 Un san lunes “memorable” por el frío que estaba haciendo al amanecer; por el enorme número de lanchas comerciales que circularon temprano moviendo a la Piñitas de mala manera (lo que me produjo un manifiesto dolor de espalda, al grado que creo necesito abstenerme de ir al mar por al menos en los próximos 3 días); por la cantidad de chinchorros que había tendidos (en 2 ocasiones se engancharon los señuelos), que capturaban de todo, dejando solo los mini peces que pudieron atravesar las mallas (se me prendieron sierritas, toritos, bichis, peces lagartija y hasta una cabrillita que era notoriamente más pequeña que el señuelo Bomber de 16cm que estuve utilizando para desestimular la acometida de los bichis) y que gracias a los anzuelos simples con los que habilito mis curricanes, fueron regresados al mar sin mayores daños.

domingo, 27 de enero de 2019

27.01.19 Una mañana dominguera muy fría y con una marea arrastrada pero que sin embargo, nos proporcionó amplias satisfacciones ya que el Abe se siente un experimentado operador del motor Suzuki de 15hp, al igual que pescador de animales pues en el corto lapso de tiempo que estuvimos en el agua, atrapamos y liberamos 15 peces.

viernes, 25 de enero de 2019

25.01.19 Una muy friolenta (el agua a 19°C, el viento con ráfagas de hasta 15 km/h), mini jornada (de 6:45 a 8:30h), en la que el Abe (pudo ir a pescar y navegar por ser último viernes de mes en la que los trabajadores de la educación “evalúan” el desempeño de programas; ahora se levantó “tarde”, a las 5 de la mañana), tuvo excelente suerte ya que en total, pudo subir (y liberar), 10 piezas (la mayoría, sierras), por 2 que se le escaparon. Espero que, el Señor nos siga proporcionando a ambos, la paciencia y perseverancia para que la convivencia nieto-abuelo, siga por el buen camino.

lunes, 21 de enero de 2019

21.01.19 Un san lunes “intenso” ya que durante el tiempo que duró la mini jornada de navegación y pesca de este día (6:45 a 8:30h), además de la gran variedad de animales que pude capturar y liberar (sierras, pargos, cabrillas areneras, peces lagartija, bichis, toros), había una cerrada neblina que además de humectar todo el equipamiento, (inclusive el lente de la GoPro), impedía tener visión más allá de los 10m; esta fue la principal razón por la que terminé profundamente cansado ya que oía en las proximidades (y me angustiaba; "estresaba" para los anglofílicos), el ruido de los motores de los pescadores comerciales que sin la menor precaución, a pesar de la poca visibilidad, se desplazaban a velocidad inmoderada. Para mi fortuna y con la protección del Señor, no tuve que lamentar ningún incidente desagradable.

domingo, 20 de enero de 2019

20.01.19 “Mayúsculo” equívoco de las páginas del internet que auguraban para hoy un domingo calmo ya que durante el lapso de la mañana que estuvimos en el agua (de 6:45 a 8:30h), hizo un fuerte viento con ráfagas de hasta 22 km/h y temperaturas frías para un niño y un “joven” de la tercera edad; por si esa adversidad fuera poco, en el agua había muchas algas que “ensuciaban” los señuelos sin permitir su adecuado accionar, a pesar de que íbamos de "estreno" con carretes Okuma Stratus (tienen 9 baleros). Pero el Señor con su infinita benevolencia, siempre dispone las situaciones y medios para que un abuelo y su nieto se "diviertan" (a las 4:30h ya estaba exigiendo que nos fuéramos al náutico), en lo que más les apasiona y al final de la jornada de pesca, el saldo quedó en 7 peces lagartija (todos regresados al agua sin daños mayores), que fueron suficientes para que el Abe (los vecinos le pusieron "niño masoquista" porque escuchan mis gritos cuando lo reprendo), tuviera su dosis semanal de convivencia, aprendizaje, desavenencias y todo lo que implica la relación abuelo-nieto. 


domingo, 13 de enero de 2019

13.01.19 Un nada agradable domingo (por algo no me gusta ir en este día de la semana), ya que no hubo pesca ni en calidad ni cantidad (la marea estaba inamovible) y además, había muchos pescadores comerciales que tendían chinchorros sin boyas y al no detectarlos, nos pegábamos en ellos (por el esfuerzo, se le barrieron los engranes a uno de los carretitos Okuma y también perdimos un señuelo Bomber); sin embargo, la satisfacción de un nieto levantándose a las 4 de la mañana, siempre esperanzado en la pesca y la navegación (a pesar de los movimientos violentos de una lanchita de aluminio de 3.60m que al paso de otras embarcaciones se mueve bruscamente), resulta una extraordinaria vivencia para cualquier abuelo que los trata de alejar momentáneamente, de las tablets, de la tele y de tantas otra desviaciones (algunas perjudiciales), que les ofrece la vida moderna.


sábado, 12 de enero de 2019

12.01.19 Después de más de 10 días de no “cumplirle” a mi “querencia”, hoy el Señor me permitió compartir una mini jornada con mi nieto Abe; temprano y cuando llegamos al náutico, había neblina (eso motivó que le pusiera tapa boca), hacía frío (el ambiente a 15°C; el agua a 19°C), para aumentar el contexto negativo, en todo el trayecto de pesca nos acompañó un lobo y finalmente, cuando se inició la subida del agua, encontramos lama que impedía el buen funcionamiento de los señuelos. Sin embargo, estos “inconvenientes” fueron superados por la tremenda afición de abuelo y nieto que nos las ingeniamos para atrapar peces lagartija, toros, bichis, una sierra (nos las quitó el lobo) y un coconaco que para nuestro desconsuelo, se encuevó y nunca lo pudimos despegar de las piedras.

martes, 1 de enero de 2019

01.01.19 Un primer día del nuevo año en el que se me permite “disfrutar” (tal vez no sea correcto el término ya que hizo mucho frío; se me olvidó ponerle los tapones a la Pa’ntonces y casi me lleno de agua; los lobos me quitaron más de 7 bonitas; de regreso y con el viento NNO, me pegué una buena bañada y para rematar, perdí un señuelo Williamson), de mi afición-pasión-vicio. Cuando pude “ganarle” a los lobos, subí bonitas y jureles (estaban de muy buen tamaño), pero como no siempre lo lograba, opté por regresarme al náutico, después de 4.5h de navegar en solitario, sumamente cansado (además y cuando tuve comunicación, apesadumbrado porque al carro de mi esposa la embistió un borracho y gracias a las bolsas de aire, ella no sufrió lesión alguna), aunque siempre supe y sentía que contaba en caso de ser necesario, con la ayuda del Señor.