sábado, 29 de junio de 2019

29.06.19 Última nota de bitácora de este caluroso junio (a las 6AM, la superficie del agua dentro de la bahía de Topolobampo estaba a 31°C), en el que de nueva cuenta (gracias a la infinita benevolencia del Señor), los señuelos Storm que tengo habilitados con anzuelos simples Gamakatsu (a pesar de lo viejo que están, conservan su filo como cuando nuevos), motivaron a pargos, coconacos y muchos, muchos cochis (se prendían de todos lados: de las aletas, de la panza, de la cola), a embestirlos para que en un lapso solo 2 horas, este vetusto pescador quedara satisfactoriamente cansado por haberle cumplido a la afición-vicio-pasión que me tiene atrapado en estos últimos tiempos. 

jueves, 27 de junio de 2019


27.06.19 Hoy fuimos con el Abe para que conociera la piedra que está fuera de la bahía de Topo, en la línea de costa de Punta Copas hacia el sureste (aunque a mi me dio cierto temor por la altura y la frecuencia de la cresta de las olas, al Abe nieto le causaba hilaridad cada vez que se aproximaba un “burro” y reventaba frente a la Mi Última), con tan buena suerte (no cabe duda; el Señor nos sigue consintiendo), que al poner en el agua señuelos Bomber y Storm, se prendieron corvinas y toros que hicieron la delicia del incipiente pescador que además y pese a su corta edad, en esta ocasión llevó al motor Suzuki DF90A hasta las 4,000 rpm (velocidad con la que sintió seguridad en el control de la embarcación), sin que lo atemorizara los más de 45 km/h a los que se desplazaba la Sea Hunt.


sábado, 22 de junio de 2019

22.06.19 Ahora si fui decidido ha “trabajar” en la propela del Suzuki DF90A (pensé que se le había enredado monofilamento; cuando la desarmé, no había nada en el sitio que se supone tiene para “almacenar” hilos y otro tipo de basura), pero para que no se fuera la oportunidad de cumplirle a la afición-pasión-vicio que me domina, puse a la embarcación Piñitas en el agua por un corto lapso de tiempo (6 a 8h), e hice el recorrido frente al náutico y San José, con tan buena suerte (gracias a la benevolencia del Señor), que los señuelos Bomber y Storm se dieron a la tarea de atraer peces como toros, cochis (fueron los más y me cansaron “satisfactoriamente”) y coconacos. El agua superficial estaba a más de 30°C y con la marea “muerta”, el oxígeno disuelto se encontraba abatido por lo que solo en el estrato de más de 2.50m, había peces depredadores y en la superficie, peces forrajeros (de hecho, una lisa brincó y golpeó la falca de aluminio de la lanchita).

jueves, 20 de junio de 2019

20.06.19 Otro de esos días que el Señor me ha permitido disfrutar estos años dorados, ahora en compañía del Abe que se portó de maravilla ya que además de manejar la embarcación Pa’ntonces con toda propiedad, (la verdad es que el pronóstico del internet fue muy acertado y el mar estaba calmo aunque a 29°C),  estuvo muy atento a las cañas y se la “rifó” sacando bonitas de muy buen tamaño, además de barriletes (hubo uno que lo hizo emplear todas sus energías y que después de ponerlo arriba de la lancha, lo llamó “el rey de los barriletes” de tan grande que estaba) y un buen dorado que nunca pudimos acercar a la embarcación. Obviamente, también visualizamos caguamas y delfines que deleitaron ampliamente al incipiente pescador que recién cumplió 6 años y que acaba de terminar su instrucción preescolar (kínder).

lunes, 17 de junio de 2019

17.06.19 Con el pretexto de liberar la propela del Suzuki DF90A del monofilamento que se le enredó el día de ayer, hoy fui al náutico y aprovechando que es un “san lunes” (efectivamente, había pocos pescadores comerciales), puse a la Piñitas en el agua por un corto período de tiempo (de 6 a 7:30h), con tan buena suerte (sigo siendo uno de los “consentidos” del Señor), que frente al náutico (ya que no era prudente ir más lejos  pues estaba muy ventoso, más de 25 km/h; muy caliente el agua, del orden de los 29°C y muy baja la marea), primero se prendieron unos pargos sarteneros (todos fueron regresados al agua) y cuando esta liberando a uno de ellos, la caña de babor (fue la que ayer se quebró; la arreglé poniéndole otra punta y cambiando la línea lo cual fue muy afortunado), comenzó a producir el adrenalóico sonido que tanto, tanto disfruto (es por ello que estoy “atrapado” hasta la médula con este vicio-pasión-afición), ya que se había prendido en el señuelo Storm de 7 cm (hasta los elefantes comen cacahuates), un soberbio pargo de 55 cm que después de una pelea de aproximadamente 10 min (con algunos de los marinos absortos, viendo el “mañanero” acontecimiento), pude poner a buen recaudo en la embarcación de aluminio. Finalmente y por un manifiesto cansancio, no realicé el trabajo que originalmente motivó mi ida de este día al náutico, aunque es obvio que no urge y puede esperar para otra mejor ocasión.

domingo, 16 de junio de 2019


16.06.19 Siguen las buenas capturas (hoy también hubo pargos sarteneros, además de bichis y peces lagartija), en Topolobampo; obviamente, también tuvimos temperaturas extremas en el agua (28.8°C, viento del orden de los 25 km/h), que no arredraron al Abe para que fuera mi excelente compañero de aventuras en este día del padre (me enteré de esta celebración mercantilista que por supuesto no comparto, por un mensaje de mi esposa), en el que perdimos una caña ya que con la enérgica marea, por estar peleando un bichi y obviamente por un descuido de mi parte, la otra línea se enredó en la propela del Suzuki DF90A y para poder liberarla, se hizo necesario quebrar el extremo de una Shimano de 5.6”.


sábado, 15 de junio de 2019

15.06.19 De vuelta a las “andadas” con el Abe que hoy me acompañó al náutico, ante la disyuntiva de “aguantarlo” en casa o llevármelo al mar a pesar de los 25 km/h de velocidad del viento y de la temperatura del agua de 28.5°C, pero como el Señor “me quiere mucho”, todo resultó de maravillas y hubo pargos sarteneros, cochis, cabrillas pimienta y cochis (todo frente a las instalaciones de los marinos ya que no era prudente alejarse más), en los señuelos Bomber y Storm; fue una jornada muy corta (de 7:45 a 9h; con la marea entrante), pero bastó para “cansar” al susodicho y aplacar su enorme (gracias al Señor), potencial físico, anímico y de intelecto.

jueves, 13 de junio de 2019

13.06.19 Una espectacular mini jornada (7 a 8:30h; se generalizó el aire que estaba pronosticado y que probablemente, nos vaya a tener “secuestrados” en los próximos 3 o 4 días), en la embarcación Mi Última habilitada con el motor Suzuki DF90A; durante la subida del agua, hubo muchos cochis, cabrillas pimienta, coconacos (se me prendieron 5, todos de tamaño mediano y por consiguiente, fueron liberados), sierras (2 de aproximadamente 30cm; también fueron liberadas) y una corvina del orden de los 60cm (peleó como si midiera más del metro y también se ganó su libertad). El motor se portó de maravillas y pues vamos a tener que “soportar” (el Señor sabe porqué lo hace), al Sureste inclusive hasta el próximo lunes.

lunes, 10 de junio de 2019

10.06.19 “San lunes” en Topo con llovizna, una marea inmóvil, el agua a 28°C, muchos pescadores comerciales y extrañamente, también deportivos (casteando y “pistoleros”), pero con abundantes peces que se abalanzaron sobre los señuelos que puse en el agua; hubo cochis, bichis, cabrillas areneras hasta meros juveniles (saqué y por supuesto liberé, uno del orden de los 30cm), aunque el principal motivo de estar en el agua (y después de un viernes épico con la captura del marlín), fue el de asegurarme del correcto funcionamiento del Suzuki de 15hp montado en la Piñitas, después del largo tiempo que estuvo sin usarse.

viernes, 7 de junio de 2019


07.06.19 Excelente manera de abrir la bitácora del mes de Junio (a las 4AM visualicé en las páginas de internet que iba a haber buen tiempo), ya que además de las típicas bonitas (andaban junto con barriletes por lo que su pesca resultó muy cansada), en el mismo sitio se prendió un buen marlín rayado que puso a prueba la ya menguada resistencia de este “joven” de la tercera edad; el animal “peleó” más de 45 min (hubo momentos en los que el “trabajarlo” me dejaba exhausto y tenía que dejar la caña en el tintero para descansar), lo cual tuvo una repercusión negativa para el picudo ya que se murió cuando lo acerqué a la embarcación Pa’ntonces. Una vez que me hube cerciorado de que estaba exánime, traté de subirlo por la falca y no pude (toda la secuencia de esta “ardua” labor está grabada por la GoPro), por lo que tuve que utilizar mis últimas fuerzas para subirlo por la puerta posterior; fue entonces que me percaté de que ya dejé atrás “mis mejores días” y aunque era temprano (alrededor de las 9AM), me direccioné al náutico a donde llegué cuando apenas eran las 10:30AM, no sin antes volver repetir una de mis frases predilectas: “Dios, voy a extrañar estos días cuando me muera”