martes, 31 de mayo de 2016

31.05.16 Termina mayo de excelente manera (la mini jornada de hoy también se dio sin la presencia de muchos pescadores comerciales ya que se encuentran celebrando el día del marino; es probable que mañana 01 de junio, la bahía también este prácticamente sola), porque hubo abundancia de toros (aunque esta vez no me rompieron el monofilamento, uno de ellos le quebró la punta a otro anzuelo Owner 1/0 y lo tuve que sustituir), barracudas, cochis, bichis, pargos (me traje uno) y en esta ocasión, me deleitó con su pelea un buen coconaco (también me lo traje; me gusta mucho su cabeza en caldo), que se prendieron en los señuelos Storm que han resultado muy aptos para el tipo de mareas que se están dando últimamente en Topolobampo. Lo que no resultó placentero fue la llovizna, la intensidad del viento (otra vez tuve que “soportar” el ruido generado por la ola al chocar con el aluminio de la Piñitas y los relámpagos que en las primeras horas de la mañana hicieron acto de presencia en la bahía aunque posteriormente, el Señor nos deleitó con un espléndido arco iris que invita a la reflexión y reafirma lo pequeño que somos en relación con el cielo, el mar y todo que El ha creado.

lunes, 30 de mayo de 2016

30.05.16 Una mini jornada (6:15 a 8:20 h), excelente en las inmediaciones del náutico, donde la pasarela de la mañana la iniciaron los cochis seguidos por las barracudas, los peces lagartija, los bichis, las cabrillas areneras, los pargos (me traje 3, dos de ellos sarteneros y otro de 49 cm, bueno para zarandearlo) y para cuando se generalizó la bajada del agua, hicieron su aparición los toros uno de los cuales,  grande y peleonero, me rompió la linea y me quitó un señuelo Storm (me pesa más que se haya llevado también un anzuelo simple Owner), después de haberlo “trabajado” por más de 10 minutos, lapso de tiempo durante el cual lo pude acercar en 2 ocasiones sin que me haya dado oportunidad de subirlo a la embarcación. En esta mañana de lunes y tal como lo esperaba, hubo pocos pescadores comerciales; sin embargo y contrario al pronóstico, estaba puesto un viento del oeste cuya intensidad “chocaba” contra la salida del agua y hacía notoriamente ruidosa la “Piñitas”, inconveniente que minimizo al poner los señuelos lo más lejos posible, sin comprometer la longitud total de la linea hilvanada en los carretes.

sábado, 28 de mayo de 2016

28.05.16 Una bonita jornada frente a las instalaciones del náutico (el “pretexto” de hoy fue que iba a realizar tareas de mini mantenimiento en los motores como limpieza de los ánodos de sacrificio, las terminales de la batería, etc.), en la que hubo  y a pesar de que el agua estaba “arrastrada” y bajando, gran variedad de especies (iniciaron la “pasarela” las barracudas, siguieron los cochis, las cabrillas areneras, luego hubo toros y entreverados con ellos, pargos; inclusive se prendió un robalo que se autoliberó cuando lo quise subir a la “Piñitas”), que fueron atraídos por los señuelos Storm habilitados con anzuelos simples, mismos que permitieron regresar casi todos los animales (excepto 4 pargos, 3 de ellos sarteneros y otro de 43 cm), a su hábitat y sin mayores daños. Definitivamente, fue una placentera experiencia después del “trauma” que me dejó la última salida al Farallón, ya que considero “agradable” el cansancio que me produjo el haber “trabajado” 6 toros (especie muy, muy “peleonera” y fuerte), con las cañitas y carretes Daiwa Sweepfire, habilitados con línea de 7 kg.

miércoles, 25 de mayo de 2016

25.05.16 A las 4 h vi que habría oportunidad de verificar las acciones de mantenimiento en el Honda 90, (aparentemente, en los próximos días habrá viento intenso e inclusive las jornadas dentro de la bahía se verán muy limitadas), sacándolo a dar un “paseo” por el Farallón y como este viaje no estaba programado, tuve que esperar a que llegara el tractorista al náutico (Alejandro me pidió que le trajera unos barriletes), lo cual ocurrió hasta las 7:10 h; todo transcurrió de manera normal (olas se 0.50 m con crestas a cada 12 s, con intensidad del viento del orden de los 5 km/h), hasta que en la piedra, se desató una tormenta primaveral con lluvia intensa acompañada de descargas eléctricas que hizo muy “traumática” la jornada pues tuve que suspender la pesca (afortunadamente después de haber sacado “n” barriletes de los cuales, 6 le llevé al tractorista), poner en neutral el motor (la fricción de las partículas de agua con la falca de la lancha producen electricidad que puede atraer al rayo), bajar la antena del radio, poner las cañas en el piso de la embarcación y pegarme mucho al cerro para que su elevación minimizara la posibilidad de atraer una descarga eléctrica a la Mi Última. Así transcurrieron las horas hasta que dejó de “tronar” el cielo (recordé la regla: si lo escuchas te puede alcanzar) y aproximadamente a las 13 h, me direccioné al náutico a donde y gracias a la infinita bondad del Señor, llegué satisfactoriamente, ahora con una aventura más que compartir con los nietos que siempre están ávidos de que el abuelo les platique sus vivencias.

lunes, 23 de mayo de 2016

23.05.16 “Tuve” que meter al agua la Sea Hunt para que se calentara bien el aceite del motor y poder cambiárselo eficientemente; para tal efecto, me fui a “pasear” los señuelos Storm, con tan buena suerte que se complementó la “pasarela” del día de ayer con especies como sierras, pargos, toros, cochis, además de cabrillas areneras y bichis. Lo relevante de esta mañana se dio en los trabajos de mantenimiento ya que cuando drené el aceite del motor Honda 90, olvidé ponerle de nuevo el tapón y de ello me di cuenta hasta que estaba agregando el aceite nuevo, mismo que se estaba escapando al depósito del líquido a desechar en el almacén temporal de residuos peligrosos; esta situación no me había pasado previamente y cuando lo platiqué con mi esposa, su respuesta fue categórica: “Nunca antes habías tenido casi 67 años” ……. y tiene razón, pero como buenos “especímenes humanos” nos resistimos al paso del tiempo que se muestra implacable en el aspecto físico, aunque siempre contamos con la ayuda del Señor para que la edad sea un estímulo y no una angustia.

domingo, 22 de mayo de 2016

22.05.16 Día de contrastes y de “talacha”; solo alcancé a darle mantenimiento a los motores Honda de 5 hp y Suzuki de 6 hp (dejé para mañana el Honda de 90 hp), porque “perdí” un poco de tiempo dándole una “paseada” a los señuelos Storm, frente a las instalaciones del náutico, los marinos y la escollera de la API. Hubo mucha variedad de peces entre los que destacaron roncachos (siempre que el agua está “arrastrada” es la especie dominante), barracudas, cabrillas areneras, bichis y peces lagartijas, mismos que fueron regresados al mar sin mayores daños; inclusive supe que mi amigo Pedro Gallardo (anda estrenando motor nuevo Yamaha de 8 hp montado en una lanchita especial para la bahía), sacó una sierra (y también el Ing. Mena reportó la captura de varios toros), por lo que durante esta dominical subida del agua, los peces estuvieron más o menos activos. Grata sorpresa me causó el hecho de que al revisar el termostato y la bujía del motor Honda de 5 hp, (modelo 2005), se encontraban totalmente limpias por lo que ahora y siempre, sigue siendo el mantenimiento la clave del buen estado de los equipos.

viernes, 20 de mayo de 2016

20.05.16 A las 4:30 h y después de ver el pronóstico de esta mañana para la zona del Farallón (altura de la ola menor a 0.50 m; frecuencia de la cresta de 15 s; intensidad del viento menor a 10 km/h), decidí emprender el viaje en solitario para verificar que la embarcación Sea Hunt (Mi Última), con el motor Honda de 90 hp, estuviera en buenas condiciones de funcionamiento después de más de 20 días de inactividad. Recorrí más de 100 km durante 5:30 h (en los señuelos Williamson Speed Pro y en los alrededores de la piedra, se prendieron barriletes al por mayor), en un mar calmo pero con un agua “sucia” (había muchos algas filamentosas), con la temperatura del agua superficial en el orden de los 25°C. En esta jornada pude constatar que ha cambiado la posición de los bancos de arena en Punta Copas y al regreso, me reventó una ola en el costado de la lancha lo que provocó un momentáneo desequilibrio que me mandó al piso de la embarcación; gracias a Dios esta situación no tuvo mayores consecuencias (con huesos viejos, hay que extremar precauciones), e inmediatamente retomé el rumbo correcto hacia el canal de navegación interno.

miércoles, 18 de mayo de 2016

18.05.16 Falló el pronóstico (o la interpretación que di a las variables climáticas), porque el viento estaba a todo lo que daba (más de 10 km/h cuando eran 4 km/h lo que yo esperaba; terminé empapado, cosa que no me había tocado vivir en la “Piñitas”), pero a pesar de lo incómodo de la situación, durante la subida del agua hubo gran variedad de especies de peces (cabrillas areneras, peces lagartija, bichis, barracudas y pargos), que hicieron menos traumático el lapso de tiempo que pasé en el agua. Por la intensidad del viento, puse en el agua señuelos Bomber (se hunden más y consecuentemente, el monofilamento permanece estable), además de que a mayor profundidad, menos caliente esta el agua (hoy teníamos 29°C en la superficie), por lo que hay mayor concentración de oxígeno disuelto, escenario que disfrutan los depredadores. Hoy me traje 2 pargos sarteneros y todos los demás animales se regresaron sin mayores daños a su hábitat, que esta ocasión lucía turbio por la gran cantidad de material suspendido que se genera con el choque de la ola en la escollera; ahora espero que la mojada sirva para desterrar la gripa nórdica (creo que la “atrapé” en el reciente viaje a Dinamarca), que tiene disminuido mi diario accionar.

lunes, 16 de mayo de 2016

16.05.16 Excelente recibimiento (tenía más de 10 días ausente), de parte de mi “querencia” frente a las instalaciones del náutico; metí la “Piñitas” a las 6:15 y para las 8:10 h (cuando terminó de subir el agua), tuve 6 ataques violentos sobre los señuelos Storm generados por 5 pargos (me traje 2 animales; uno para la comida de hoy con mi esposa y el otro para la familiar del próximo fin de semana) y una barracuda que se regresó idemne a su hábitat; el más grande de los pargos (4.82 kg de peso y 67 cm de largo), se prendió apenas despuntaba el sol y me produjo tal satisfacción que aún después de ponerlo en la hielera, continuaba riéndome solo en agradecimiento al Señor que se muestra magnánimo con esta mi afición-pasión-vicio y también en todas las demás vertientes de nuestra existencia. El motorcito Honda se portó muy bien (como si ayer lo hubiera usado) y definitivamente, ahora que estoy atento al profundímetro que le he instalado a la lanchita de aluminio, siento mucha más confianza en las mini jornadas de pesca dentro de la bahía.

lunes, 2 de mayo de 2016

02.05.16 Hoy fui a “despedirme” de la bahía (también aproveché para abrir la bitácora de mayo), con tan buena suerte que en esta mini jornada (6:30 a 8 h), se involucraron la mayoría de las especies que comúnmente encuentro frente a las instalaciones del náutico: los primeros peces que se presentaron fueron las barracudas (6), luego siguieron los cochis (5; uno de ellos se llevó uno de mis más apreciados señuelos Bomber pues con los dientes abrió el broche del empate de acero), seguidos por las cabrillas areneras (2), sierras (2), sábalos (3), bichis (n), coconacos (2) y pargos (1), que constituyeron toda una pléyade de representantes del nécton; todos fueron devueltos al mar sin mayores daños gracias a los anzuelos simples, con excepción del pargo (45 cm y casi 2 kg de peso) y un coconaco de aproximadamente 0.75 kg que este día se va directo a la cocina. Sintiendo haber hecho lo correcto tratándose de despedidas, ahora si y más que satisfechos, nos alejaremos por un tiempo de estas “querencias” esperando regresar (así sea con la benevolencia del Señor), en fechas próximas.