31.03.19 Contra mi costumbre (normalmente los domingos evito ir a Topo por las “aglomeraciones” de pescadores deportivos que en ocasiones se ponen muy agresivos), hoy día último del mes quise tener “elementos” adecuados para cerrar la bitácora de este fabuloso Marzo y con la benevolencia del Señor que me aprecia mucho (a pesar de que mi esposa diga lo contrario), se convirtió en una espléndida mini jornada (6 a 8h), ya que durante la subida del agua, los peces se “arrebataban” los señuelos que puse en el agua; hubo pargos (a la casa me traje 2; uno de 55cm y otro de 46cm), además de unos cuantos sarteneros que regalé en el ejido. También hubo coconacos (me traje uno muy bueno de 42cm), sierras (también las regalé a nuestros vecinos) y un sinnúmero de animales de otras especies (toros, roncachos, bichis, cochis y peces lagartija), que regresé al agua sin mayores daños.

28.03.19 Ahora en la embarcación Mi Última, realicé una corta jornada por mis sitios de pesca sólo para comprobar que aún con marea “muerta”, los peces son proclives a embestir los señuelos que se les ponen enfrente; así y en el mismo sitio de los últimos viajes, se prendieron coconanacos y corvinas (también se me prendieron bichis pero con yo-yo, no en los Bomber de 16 cm), que serán obsequiadas a nuestros vecinos en el ejido. Este viaje sirvió también para atestiguar el cambio que se observa en la temperatura del agua y además, la surgencia de mantos de algas filamentosas que obstaculizan la pesca dentro de la bahía de Topolobampo.

25.03.19 Magnífico “san lunes” este que el Señor me permitió experimentar pues a pesar del viento y de la marea “arrastrada”, los señuelos Bomber de 16 cm (grandes, para desestimular a los bichis y cochis y que de hecho, no se me prendió ninguno), tuvieron el atractivo necesario para que fueran embestidos por coconacos (me traje 2 para comenzar el acopio de peces que serán degustados en la cuaresma y en la próxima Semana Santa) y corvinas que tuvieron como destino, nuestros vecinos en el ejido.

20.03.19 Después de 6 días de no estar en contacto con mi “querencia”, hoy temprano me fui a Topo y aunque cuando salí del ejido no había neblina, en el náutico la visibilidad era nula; puse en el agua la embarcación Piñitas y como la marea estaba “arrastrada”, utilicé señuelos Rapala Floating que hacía mucho tiempo (previamente los habilité con anzuelos simples), no los “mojaba”; tuve muy buena suerte ya que a la primera pasada que di, se me prendió un buen pargo que midió 48 cm. A las 7:30h la neblina no se levantaba y ante el temor de que otra embarcación me embistiera (me encomendé al Señor para librarme de un mal momento), opté por salirme del agua no sin antes completar mi agradable mini jornada, con la captura de muchos peces lagartija.

13.03.19 Después de la llovizna del día previo, hoy hizo mucho frío y aire en Topo, además de que la marea estaba “muerta”; sin embargo y gracias a la benevolencia del Señor, las corvinas estaban en el mismo sitio que antier y ahora, integrando a la comunidad del necton, también hubo pargos sarteneros. La pesca la realicé en la embarcación Mi Última (para seguir “enseñando” al Suzuki 90), con señuelos Bomber de 16 cm (para desestimular la embestida de bichis, cochis y peces lagartija; la “estrategia” me funcionó porque no se prendieron individuos de especies indeseables), para que se fueran lo más profundo posible.

11.03.19 Un excelente “san lunes” ya que a pesar de la “ingrata” marea, lo nublado, la basura de los “turistas” domingueros que con la llegada de la próxima primavera, acuden a la bahía cada vez en mayor número, me encontré con las corvinas (me traje 2, una de ellas de muy buen tamaño ya que llegó a los 65cm y después de cordelearla durante más de 7 minutos me cansó, con la benevolencia del Señor, “satisfactoriamente”), mismas que con la habilidad innata de mi esposa para la cocina, vamos a transformar en unas ricas albóndigas, ahora que está vigente la cuaresma.

07.03.19 Me fui a Topo y puse en el agua a la embarcación Pa’ntonces la cual tenía más de 2 meses de no moverse y como siempre lo he dicho, las lanchas son muy “celosas” y si no las atiendes con regularidad, esmero y paciencia (al igual que nuestras compañeras de vida), se molestan y te dan problemas; este fue el caso del día de hoy ya que falló uno de los motores Suzuki DF140A (se le entrampó el cable del acelerador; tuve que pararme a lubricarlo para que volviera a funcionar adecuadamente), se le desprendió una tabla al remolque y creo comenzó a fallar el marcador de la gasolina aunque esto no pude comprobarlo del todo. Aún así, tuve la oportunidad de darme unas vueltas por el canal de navegación interno, donde pude capturar (y liberar sin daños), sierras y bichis.

02.03.19 Hoy  también conté con la “ayuda” del Abe para terminar los trabajos en el Suzuki 90 pero antes, nos metimos una hora (6:40 a 7:40h; hasta que comenzó la bajada de la marea), al agua y en cuanto pusimos los señuelos en el agua, se prendieron bichis, peces lagartija y en la caña que cuidaba el Abe, un “enorme” pargo de 50cm de longitud y como ni siquiera me permitió que nos tomáramos juntos la foto, no me queda más que decir: “era presumido (y por supuesto, también el abuelo), el plebe ……….y el Señor le proporcionó los elementos para exacerbar ese sentimiento.

01.03.19 Esta mañana programé el cambio de aceite, filtro y a la transmisión, del asentamiento (las 20h), del Suzuki DF90A y para llevar a cabo esta tarea, conté con la excelente “ayuda” de mi nieto Abelardo; obvio que antes de iniciar el “traumático” trabajo (es muy laborioso el cambio de filtro pues hay que quitar las tolvas laterales y el tornillo de llenado de aceite de la transmisión está en un lugar poco accesible), salimos una media hora frente al náutico y en este corto lapso de tiempo, encontramos a las sierritas (todas fueron regresadas al agua sin mayores daños), aunque también hubo bichis y peces lagartijas. La salida de este día también sirvió para abrir la bitácora del mes de marzo.