29.05.17 Una mini jornada (6 a 9h), de contrastes ya que por una parte, la
embarcación Piñitas y el motor Suzuki de 6 hp (al igual que la Pa’ntonces y los
DF140A utilizados el sábado próximo pasado), se portó de maravilla y la pesca dentro de la bahía está donde mismo (hubo muchos, muchos
cochis, unos pocos de bichis y solo 2 coconacos); en contra sentido, creo haber visto más sucia el agua de la bahía (muchas bolsas de plástico por lo que había
que limpiar los señuelos con frecuencia), chinchorros de pescadores comerciales
a pesar de ser lunes y lo mas angustiante fue que un animal se encuevó y me
rompió el monofilamento, llevándose el señuelo y el líder de acero de más de un
metro (obviamente, la zozobra es por la incertidumbre acerca del potencial daño
que le pueda causar al animal, el anzuelo simple de acero al carbón). Con esta
nota cierro la bitácora de mayo y solo espero en Dios que así como me cobija,
proteja al animal involucrado en esta jornada, de daños severos.
lunes, 29 de mayo de 2017
sábado, 27 de mayo de 2017
27.05.17 El pronóstico para este día señalaba “smooth seas” (mar liso, pero fuimos
“engañados” junto con el Dr. Pedro Gallardo), que se equivocó rotundamente ya
que el mar estaba sumamente agitado; de cualquier manera y debido a la larga “abstinencia”
sin salir a navegar y “cumplirle” a la pasión-afición-vicio, llegamos hasta el
Farallón y después de “n” bonitas y tremendos toros (de más de 1.20 m que
hicieron sonar estentóreamente los carretes Penn 6/0), decidimos mejor regresarnos
ya que solo el lado noroeste de la piedra estaba “navegable”. Hoy será un día
que recordaremos puntualmente este par de viejos porque con el mar agitado,
permanecer erectos sobre la Pa’ntonces representaba un reto que se magnificaba
cuando estábamos cordelando un animal y todavía más, pues una bonita se metió
debajo de la embarcación y empropeló el monofilamento por lo que apagué los
motores, los levanté y cuando maniobraba para remover la cuerda, uno ola me
hizo perder el equilibrio y me caí al agua por lo que el resto de la jornada me
la pasé empapado pero muy contento de poder volver a las “andadas”.
viernes, 5 de mayo de 2017
05.05.17 Mi última jornada en el mar después de 6 salidas consecutivas (nada mal
para un espécimen de la tercera edad) y en la que para variar, estuvieron muy
activos los cochis (hoy no fue mi amigo Beto para regalárselos por lo que todos
se regresaron indemnes al mar), pargos (se prendieron 4, me traje 2 de 39 y 40
cm) y coconacos (se prendieron 3, me traje uno de 40 cm). Hoy me pasó otro “caso”
de esos que hacen a la navegación y la pesca, la actividad en la que debemos
esperar lo inesperado; resulta que un animal (seguramente un coconaco), atacó
un señuelo Bomber, se encuevó y por más lucha que hice desde diferentes
ángulos, no pude desprenderlo por lo que opté por amarrar una botella de
plástico vacía (siempre la traigo precisamente para usarla en estos eventos),
al monofilamento que previamente corté del carrete Okuma que atrapó al animal.
Estaba terminando de hacer el nudo para echar la botella al agua cuando noté
que la línea ya no estaba tensa y con la mano, recuperé el monofilamente solo
para constatar que del Bomber, se había salido el anzuelo (In line Owner 1X,
que tarda menos de una semana en desintegrarse), de la argolla; por lo tanto,
me quedé sin poder utilizar un carrete pero di gracias al Señor que seguramente,
muy pronto el animal podrá seguir con sus actividades normales.
jueves, 4 de mayo de 2017
04.05.17 Ante un inminente evento familiar que me tendrá alejado de mi “querencia”
por un buen tiempo, no he querido perder ninguna oportunidad de ir al mar y este(a),
me ha entregado lo mejor que le es posible proporcionar a un viejo apasionado
de la navegación y la pesca; hoy no fue la excepción y aunque la mayoría de las
capturas fueron cochis (algunos de buen tamaño los regalé a mi amigo Beto que
es pescador comercial), bichis y cabrillas areneras, los Bomber fueron capaces
de atrapar coconacos (se prendieron 3; me traje uno de 38 cm) y pargos (capturé
2; me traje uno bastante “panzón” que tenía jaibas en el estómago, de 40 cm) y
además, viví la “amarga” experiencia de que a uno de los carretitos Daiwa Sweepfire
(los he estado usando desde hace más de 3 años), en la pelea con un animal muy belicoso
que tal vez era toro, se le barrió el engrane.
miércoles, 3 de mayo de 2017
03.05.17 No pudiendo precisar si ayer desconecté las baterías de la embarcación Pa’ntonces,
hoy “tuve” que ir al náutico para cerciorarme de ello y aunque me encuentro
notoriamente cansado de la jornada previa, metí la Piñitas al agua (aproveché
la ocasión para evaluar el efecto del hule que coloqué en el soporte del
motorcito Suzuki que por cierto, mejoró bastante en la reducción de las
vibraciones), resultando una mini jornada de notorio éxito (como el Señor me
tiene acostumbrado), ya que además de los innumerables cochis, cabrillas (otra
vez salió una cabrilla prieta), coconacos (se prendieron 4, mismos que regresé
al agua sin mayores daños), corvinas (me traje una que salió muy dañada en la
pelea) y a todos ellos se unió este día un pez piedra también conocido como
lupón, (Synanceia horrida), que tiene un veneno neurotóxico en las
glándulas alojadas en sus espinas, muy similar al de la cobra y que
extrañamente (nunca antes había sacado uno con curricán), le gustó uno de los
señuelos Bomber, color azul metálico.
martes, 2 de mayo de 2017
02.05.17 Este día amaneció muy bien para salir a la “parcela” y encontrando
disponible al Dr. Gallardo, nos fuimos directamente a buscar
dorados (debido a la marea que estuvo bajando hasta las 10:30h, invertimos la
estrategia de nuestra anterior salida y ahora, en lugar de dirigirnos primero
al Farallón, nos alejamos alrededor de 20 km al sur de la boya de recale), pero
no los encontramos (había muchas, muchas mantas; cuando la embarcación Pa’ntonces
avanzaba lentamente, unos 5 o 6 animales nos acompañaban muy próximos a la popa,
situación que nunca antes nos había tocado experimentar), por lo que nos
direccionamos hacia la piedra a donde llegamos alrededor de las 11h, ya con la
marea subiendo lentamente. Ahí pusimos señuelos duros e inmediatamente, las
bonitas comenzaron a atacarlos (en una ocasión hasta en 3 cañas se prendieron
simultáneamente), por lo que el resto de la jornada (a las 12h levantamos las
líneas), se transformó en un estallido de chirriar de carretes 6/0; a las
13:15h y con una mar extraordinariamente acorde con lo pronosticado, llegamos
al náutico agradeciendo al Señor su excelente benevolencia para con este par de
vetustos navegantes.
lunes, 1 de mayo de 2017
01.05.17 Con el justificado pretexto de probar los arreglos que ayer le hice a la
lanchita de aluminio (y que mejor oportunidad para abrir la bitácora de Mayo),
hoy fui un rato al Pinto y como el Señor me tiene “consentido”, inmediatamente
se prendieron cochis, cabrillas areneras (otra vez saqué una mini cabrilla
prieta) y los infaltables coconacos (hoy se prendieron 5 y me traje 2, uno de
40 cm y el otro de 39 cm), que ayer fueron motivo de desavenencia familiar por
haberlos dejado ir sin previo permiso del “alto mando”, en cuya mente están las
comidas familiares a base de estos magníficos animales. Obviamente, la Piñitas
se volvió a portar de maravilla aunque con una mayor vibración (parece que el
ruido generado en la embarcación no influye para nada en el desempeño de la
pesca porque en el profundímetro se visualizaban grandes cardúmenes, sin
evidencia de que hubiera un factor limitante), que pretendo corregir poniéndole
un hule grueso en el soporte del motor.
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