28.02.21 Hoy domingo y contra mi costumbre, fui a Topo ya que tenía una importante misión que me encomendó mi nieto Alfonso, pues me pidió que documentara la contaminación de la bahía; para ello, metí la embarcación Mi Última que por cierto, estaba presentando fallas en el obsoleto GPSMap 498 ya que no accedía a los satélites. Una vez que pude arreglar este malfuncionamiento, me encontré con una gran mancha de espuma generada por el tamo del maíz que están cargando en el muelle comercial y que por “descuido” deliberado de los exportadores (obvio, se privilegian las utilidades), incide en la masa de agua. Esta “nata” impide la penetración de la luz lo que conlleva una notoria disminución de la fotosíntesis y en consecuencia, un evidente deterioro de la cadena trófica, además de que provoca un indeseado enriquecimiento de nutrientes en la masa de agua.

24.02.21 Ya repuesto del cansancio que me produjeron las bonitas, este día que se celebra a nuestra enseña patria fui a Topo, metí a la Piñitas habilitada con el Suzuki DF6A y aprovechado la porción de suerte (gracias a la buena disposición del Señor), que me tocó por la “mañanera” (6:30 a 8h), les traje corvinas a mis vecinos en el ejido que como a muchos pobladores del norte de Sinaloa, les gusta sobremanera el pescado. Para mi satisfacción, encontré el agua bastante limpia y con una temperatura muy adecuada (20°C), para la concentración de Oxígeno Disuelto, parámetro que a los peces les agrada bastante.

21.02.21 Un muy bonito domingo en el Farallón, con vistas espectaculares (gracias Señor por permitirme disfrutar de la navegación, la pesca y los inigualables escenarios), a través de la intensa neblina que inclusive, ocasionó se cerrara el puerto de Topolobampo por algunas horas durante la mañana; la pesca también estuvo muy intensa ya que las bonitas (para regocijo de mis vecinos en el ejido), se prendían al unísono (de hecho, perdí 2 curricanes ya que los animales en su lucha por liberarse de los anzuelos, cruzaban las líneas y eso es letal para el monofilamento), en los señuelos que puse en el agua. Hacía mucho tiempo que no utilizaba la embarcación Pa’ntonces y durante las 5 horas que hoy estuve en el agua, se portó muy bien aunque creo que debo usarla con mayor frecuencia.

17.02.21 Una “mañanera” (6:45 a 8:30h; hizo mucho frío y un viento no pronosticado), espectacular ya que además de prender corvinas, coconacos, pargos, muchos cochis y cabrillas pimienta, tuve el placer de experimentar vivencias como un acercamiento con el gato montés (parece que ya no le teme tanto a los humanos), de San Carlos; cuando liberé uno de los pargos, una manada de delfines casi me lo arrebata de las manos (hasta sentí un poco de temor); luego, un águila pescadora se clavó sobre una de las corvinas que venía prendidas y por la superficie del agua, en un señuelo Bomber aunque afortunadamente y para suerte de mis vecinos, no logró su objetivo. En fin, una mini jornada (con la benevolencia del Señor), muy placentera que deja perfectamente definido el porqué habemos tantos y tantos aficionados a la navegación y pesca.

16.02.21 Después de 5 días de ausencia del mar, hoy realicé una “mañanera” (6:30 a 8:30h), dentro de la bahía de Topolobampo en la embarcación Piñitas habilitada con el Suzuki DF6A y en esta mini jornada se evidenció que sigo siendo (a pesar de lo que digan mis detractores), un consentido del Señor ya que logré capturar coconacos (se me prendieron 5; me traje 3 para la reserva propia ya que con mucho, su cabeza en caldo es una de mis comidas favoritas), cochis varios y muchas corvinas (se prendieron 10 en los señuelos Storm; me traje 7), para mis vecinos en el ejido. Obvio y por mis años, me cansé mucho pero el cansancio que produce este vicio (hábito en el buen sentido), se atenúa cuando veo la alegría que producen los pescados al ser recibidos por las personas menos favorecidos por las actuales circunstancias de la pandemia.

10.02.21 Una copia fiel de las 2 mini jornadas previas ya que estuve en el agua de 6:45 a 8h, había neblina, hacía mucho frío y también (lo mejor para mis vecinos que inclusive están regalando pescado a sus familiares cercanos), las corvinas estaban frenéticas; se me prendieron 8 aunque “solo” me traje 5 y las demás fueron liberadas exitosamente. Este día todo (obviamente por la benevolencia del Señor), funcionó muy bien en el Suzuki DF6A y lo único molesto fue la gran cantidad de lama que hay en la bahía y que disturba el correcto funcionamiento de los señuelos.

09.02.21 Una “mañanera” (6:45 a 8h), muy similar a la del día de ayer pues las corvinas estaban en el mismo sitio y sumamente agresivas; hoy se me prendieron 8 pero afortunadamente pude liberar 4 (sin daños mayores gracias a los anzuelos simples; in line single hook para los anglofílicos), por lo que mis vecinos aumentaron sus reservas de estos especímenes. Al iniciar la mini jornada, no había neblina pero luego se presentó en forma espesa (genera distorsión de las imágenes), al grado que las autoridades marítimas cerraron el puerto alrededor de las 8:30h, cuando yo ya estaba lavando la Piñitas, el DF6A y las cañas.

08.02.21 Una “mañanera” (6:45 a 8h), de “san lunes” en la que las corvinas (me traje 6 para regalo a mis vecinos en el ejido), estaban ávidas (la suerte se reparte tempranito), de embestir a los señuelos Storm y aunque al inicio había tanta niebla que no se veía más allá de la proa de la Piñitas (en esta ocasión usé el Suzuki DF6A que de primera intención estaba renuente a trabajar pues hacía mucho tiempo que no lo ponía en el agua), al final de la mini jornada y con la salida del sol se despejó el panorama. Cuando pedí el remolque para salirme y debido a la neblina, me enteré que las autoridades portuarias habían cerrado el puerto a la navegación pero el rato que pasé en el agua (gracias a la benevolencia del Señor), estuvo excelentemente productivo y muy reconfortante.

04.02.21 Hoy y con el pretexto de quitar los guarda fangos del remolque de la Mi Última, fui a Topo y para no perder la oportunidad, salí a realizar una mini jornada (8 a 10h), con tan buena suerte y por supuesto, gracias a la benevolencia del Señor, que las corvinas (me traje 3 para los tractoristas del náutico) y los pargos (este día los regresé porque ya tengo varios; por supuesto, sin daños mayores gracias a los anzuelos simples que uso en los señuelos Storm), estaban en los mismos sitios que los dejé ayer. Para mi desconsuelo, también estaban los mismos chinchorros sumergidos que utilizan los pescadores comerciales pero ahora, pude evitarlos a tiempo aunque ello me impedía pasar por sitios donde se esta buena la pesca.

03.02.21 Con la bonita apertura ayer de la bitácora de presente mes, hoy me fui (6:45 a 9:45h), al mismo sitio para ver si lograba otro buen animal; sin embargo, los pescadores comerciales llegaron mas temprano y tendieron chinchorros de fondo y obvio, al no haber señalización alguna que los identificara, los señuelos se trabaron ipso facto en el monofilamento. Perdí alrededor de 30min tratando de liberar los Storm y cuando casi lo lograba, el viento me llevó contra la malla y entonces se generó otro problema con la inmovilización de la propela del motor; después de mucho batallar, pude seguir mi camino y el Señor, por su infinita misericordia, me compensó de la mala experiencia poniéndome en otro sitio donde había corvinas (para regalar) y pargos de buen tamaño para nuestro consumo.

02.02.21 Una épica mini “mañanera” (6:45 a 7:30h), en la embarcación Piñitas y en la que hubo gran actividad ya que entrando y frente al náutico (sentí las buenas intenciones del Señor), se prendieron bichis, cabrillas areneras y muchos peces lagartija; posteriormente me fui a Punta Prieta y visualicé un gato cola poche (lince americano; lynx rufus), por lo que me aproximé a las rocas para poder tomarle una buena foto. No fue posible pero ya con la subida del agua, vi que una de las cañas se doblaba casi hasta quebrarse y pensé que el señuelo Storm se había pegado a una piedra; después me percaté de que era un buen animal (corvina de 1.05m y peso de 8kg) y a pesar de las grandes olas provocadas por la embarcación Piloto que no respeta la velocidad a la que debe navegar dentro de la bahía, lama que se le adhería a la línea por lo que con frecuencia y durante la “pelea” tuve que “chicotear” la cuerda para liberarla de basura, enredo con la otra línea que estaba tendida y proximidad a las rocas (en el primer acercamiento, me di cuenta que apenas venía prendida; de hecho, en cuanto la saqué de la red, se liberó el anzuelo), pude “lograr” este bonito animal para beneplácito de mis vecinos que hoy precisamente están celebrando un cumpleaños.