29.03.16 Jornada de acontecimientos encontrados ya que por primera vez puse en el agua el motorcito Suzuki DF6 (funcionó bien en el período de asentamiento ya que navegué por más de 3 h y me gastó menos de 1 L de gasolina; hace menos ruido que el Honda y genera menos vibraciones aunque tiene partes como el maneral de posicionamiento muy rudimentarias), que pretendo sustituya como auxiliar en la Sea Hunt al Hondita de 5 hp; por otra parte, me siento “agobiado” porque en cuanto me metí al agua, 2 veces vi saltar a un pargo bacoco (no me imaginaba que brincaban fuera del agua), como retándome a que lo atrapara. Para la ocasión, puse en el agua 2 señuelos duros (un Storm y un Bomber) y le pasé al sitio con mucho entusiasmo y en el sentido de las olas (la lanchita de aluminio hace mucho ruido cuando tengo la ola de frente y esta mañana hizo un intenso aire del oeste, de ninguna manera pronosticado) y ¡bam!, se prendió el bacoco en el Bomber; lo tuve cordeleando por más de 5 minutos y en una “largada” que dio, se acercó a las piedras y se rompió el monofilamento (ahora me culpo porque ayer que saqué sierras, no revisé la cuerda). Solo deseo que el animal no se haya dañado mucho y que pueda seguir su desarrollo porque definitivamente y después de este evento, yo no voy a poder estar agusto; después y en la precaria subida del agua (la marea estaba muy arrastrada), se prendieron todo tipo de especies: bichis, peces lagartija, cabrillas areneras, roncachos, sierras, pargos, toros y barracudas, como si se tratara de un premio de consolación.