27.05.23 Tal como me tiene acostumbrado el Señor, hoy realizamos (con los Abe’s y Alejandro, otro de mis hijos que vino a visitarnos desde Mty), una extraordinaria jornada en la que hubo sorpresas al por mayor: a) olas altas, crestas muy frecuentes y desde 2 direcciones, contrario a los pronósticos del internet; b) muchos peces se interesaron por los señuelos que pusimos en el agua: dorados (regresamos los que resultaron menos dañados durante el cordeleo), bonitas y barriletes; además, Alejandro estuvo casteando por ratos y atrapó barriletes, bonitas, dorados y hasta un pequeños “cocinero” (pez apreciado como carnada); c) visualizamos varios “picudos” pero ninguno se interesó por nuestros señuelos; d) en uno de las peleas con un buen dorado macho (que se auto liberó), nos empropelamos y Alejandro tuvo que meterse al agua para remover el monofilamento; e) había muchas caguamas y teníamos que andar esquivándolas pero una de ellas que por supuesto no vimos, se enganchó en un señuelos que iba a 9m de profundidad; afortunadamente, el anzuelo simple se le insertó en una aleta y aunque fue difícil, finalmente pudimos liberarla sin mayores daños.