martes, 25 de mayo de 2021

25.05.21 Hoy y gracias a la benevolencia del Señor, realicé en solitario otra interesante jornada (6:30 a 12h), por las inmediaciones del Farallón ya que además de las innumerables bonitas que se saqué (para regocijo nuestro y de los vecinos en el ejido), pude disfrutar del espectáculo que brindaron los peces voladores con su largo, largo vuelo y también, las cabriolas de las orcas que saltaban en forma completa fuera del agua. El mar estuvo muy tranquilo, tal como lo pronosticó el internet y la pesca fue una verdadera sorpresa ya que normalmente, cuando hay luna llena como ahora, los peces comen de noche y no embistes señuelos durante el día pero ese comportamiento quedó solo para plasmarlo en las teorías de la pesca deportiva.



No hay comentarios.:

Publicar un comentario