06.03.16 Contra mi costumbre (procuro no
ir al mar los domingos para evitar interactuar con los pescadores deportivos
que tienen la “mala leche” de arrojar basura al agua), hoy realicé otra
mini-mini jornada que culminó en la pleamar superior (a las 8:15 h; cuando
estaba sacando la “Piñitas” del agua, algunos de mis compañeros del náutico
apenas estaban llegando para iniciar su “domingazo”), con una gran variedad de
peces capturados (afortunadamente y por segundo día consecutivo, hoy no hubo
bichis), entre los que destacaron pargos (solo me traje uno de buen tamaño que
mientras redacto esta nota, está siendo cocinado por mi esposa junto con otros
que he sacado previamente; hoy tenemos comida familiar en el ejido),
barracudas, toros, peces lagartijas y hasta una sierra se “coló” hoy al elenco;
obviamente, además de los eventos extraordinarios que Dios me permitió vivir, también
hubo situaciones negativas pues los pescadores comerciales y desde anoche,
tenía tendido paralelo a la nueva escollera de la API, un chinchorro de fondo
(no hay evidencia de su presencia pues no tienen boyas superficiales; de hecho,
le estuve pasando con los señuelos por encima y no se engancharon), de más de
500 m de longitud. El mayor disgusto que tuve fue que en mi presencia, sacaron
enmallado un pargo como de 10 kg así como otras especies de menor tamaño entre
los que se contaban los roncachos, mojarras, coconacos y corvinas; solo espero que aprovechen todos los peces depredados.
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