06.01.17 Durante los aciagos días previos (ventosos, con mareas muertas), aproveché para cambiar el termostato, el impulsor y la bujía del Honda de 5 hp y como visualicé que la mañana de este día iba a disminuir notoriamente la intensidad del viento, vi la oportunidad de evaluar los arreglos mecánicos; obviamente y para que no se fuera la mini jornada (7 a 9 h), de “oquis”, puse en el agua los ya tradicionales señuelos Storm que no me hicieron quedar mal e inmediatamente frente al náutico,  llamaron la atención de barracudas, peces lagartija y cabrillas areneras (todos fueron regresados al mar sin daños mayores). Como han sido todo un éxito las sierras con mis vecinos en el ejido, no quise irme sin representantes de esta especie por lo que me direccioné hacia el canal de navegación interno y además de la gran cantidad de basura que estaba saliendo con la marea (había que estar limpiando a cada rato los señuelos porque su funcionamiento se hacía errático cuando “atrapaban” bolsas de plástico, pedazos de piolas, cáscaras de naranja, plátano, etc.), también hubo sierras (me traje 4), de buen tamaño. El motorcito y con la benevolencia del Señor, funcionó muy bien, como si recién lo acabara de adquirir con el distribuidor Honda.