04.08.18 Hoy y después del
“revuelo” que vivimos en las vacaciones de los hijos (Alfredo sacó un wahoo;
Alejandro un marlín azul) y los nietos (el Abe y sin temor alguno, hizo su
primera incursión de buceo en el Farallón), en el ambiente marino, me fui al
náutico para que la embarcación Piñitas no se “sintiera” abandonada y aunque el
agua estaba muy caliente (32°C a las 6h), los señuelos Storm y Bomber se dieron
“vuelo” (de 6 a 8h), capturando infinidad de peces entre los que se encontraban
pargos, cochis, cabrillas areneras, bichis, roncachos y toros.
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